El último duelo (2021)
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(Fuente: FilmAffinity)
Ocurrió hace mucho, muchísimo tiempo. Exactamente, el 29 de diciembre de 1386. El lugar: Francia. El acto: un duelo a muerte entre dos hombres. El motivo: dirimir la culpabilidad o la inocencia de uno de ellos, acusado de violar a la esposa del otro. Partiendo de esta historia real, Ridley Scott estrenó, en 2021, El último duelo (DVD 11358), su vigésima sexta incursión en la dirección cinematográfica. Una propuesta que no es la típica peli de aventuras medievales, sino que se interroga sobre la condición femenina y las relaciones de género en una época lejana. Scott nunca ha superado el arranque sensacional de finales de los años 70 (Los duelistas, Alien, el octavo pasajero) y primeros 80 (Blade Runner) que lo llevó a ser considerado uno de los mejores directores del momento. Eso no quita para que, dentro de una trayectoria irregular, haya firmado otros éxitos; el último, Marte (The Martian), un drama de ciencia ficción, en 2015. O sea, el mismo año que se anunciaba la adaptación de un libro de Eric Jager sobre el último juicio por combate legalmente organizado en la Francia medieval, en el que dos partes en conflicto se batían para resolver acusaciones para las que no había testigos o confesión incriminatoria o exculpatoria.
Jodie Comer es Margueritte de Carrouges, cuya historia real ejemplifica el juego de poderes que reducía a la mujer noble medieval a poco más que el rol de peón en las estrategias familiares y matrimoniales. (Fuente: FilmAffinity).
Aquel primer intento no prosperó. Pero, en 2019, se anunció que Scott dirigiría una nueva producción, que terminó siendo co-producción USA-Reino Unido distribuida por Disney. El elenco actoral partía con Ben Affleck y Matt Demon, a los que luego se sumaron Jodie Comer y Adam Driver. Además, los dos primeros se unieron a Nicole Holofcener en la escritura del guion y en la producción. El rodaje se retrasó por la pandemia de la COVID-19, lo que a su vez retrasó el estreno oficial (brevemente en cines y después en plataforma digital). Antes, en septiembre, fue la exhibición en el Festival de Venecia, fuera de concurso. No era la primera incursión de Scott en el género medieval, porque ahí están El reino de los cielos (2005) y su versión del clásico Robin Hood (2010). The Last Duel es otra cosa. Contiene acción y escenas violentas, pero nada de épica grandilocuente. Aquí se trata sobre todo de diálogos y presencias físicas. La estructura narrativa sigue el juego de perspectivas de Rashomon (Akira Kurosawa, 1950). Scott narra desde tres puntos de vista la concatenación de hechos que conducen al duelo final del título, uno por protagonista: sucesivamente, el caballero Jean de Carrouges (el afrentado), el escudero Jacques le Gris (el afrentador) y Margueritte (la esposa ultrajada).
Jacques le Gris (Adam Driver) y Jean de Carrouges (Matt Damon) se disponen a enfrentarse en combate judicialmente sancionado. (Fuente: FilmAffinity).
Las tres narraciones pertenecen a la misma historia, con variaciones y detalles que exigen atención. Scott deja claro cuál es la verdadera. Esta toma de partido le valió acusaciones de subirse al carro del #MeToo por puro oportunismo, así como de ignorar la realidad histórica. Ambas críticas son discutibles; pero lo cierto es que, por una razón u otra (tema poco comercial, número de proyecciones limitado, huida del público de los cines tras la pandemia), la película fracasó en taquilla, si bien le fue mejor una vez exhibida en streaming. También hubo división de opiniones entre la crítica profesional. Lo mejor será que formes la tuya después de verla.